lunes, 15 de noviembre de 2010

Educar con orientación holística

Nuevos niños, nueva educación, nueva era

 A través de la enseñanza se piensa  y planifica el desarrollo del ser humano. 
Las nuevas pautas del ser y del comportamiento de niños y jóvenes apelan a un giro que nos concierne a todos porque somos protagonistas del mismo. Es decir, corresponde a cada uno de nosotros aprender los nuevos conceptos de cambio de era, redireccionar y reorientar el proceso de aprendizaje tanto en el hogar como en el aula.
Nos encontramos con niños diferentes, despiertos, amorosos, creativos, colaboradores, intuitivos, persistentes, cibernéticos, con talentos innatos, de atención múltiple y mayor percepción, con gran capacidad  cognitiva, madurez temprana,  atención espiritual, con una visión distinta de la vida y un rechazo a las tareas rutinarias. Niños: autodesarrollados, alta sensibilidad, inteligencia emocional supradesarrollada, activación del hemisferio derecho del cerebro, facultad para actuar de inmediato.
Mayor casos de niños autistas, bipolares, teflón, DDAH. indica que son niños medicados, rotulados, hostigados, carentes de afecto, de seguridad emocional, con necesidades no resueltas
El niño de hoy tiene efecto:
·        Explosivo: lo que provoca en el adulto irritación, ira, lo cual es rotulado como niño problema.
·        Esponja : absorbe todo lo bello y lo feo, por eso necesita de un ambiente emocional estable.
·        Espejo: refleja lo que la persona es en ese momento.

Lo que nos indica que como educadores, profesionales, debemos capacitarnos para poder ayudar a nuestros niños a crecer física, psíquica y espiritualmente.
Para lograr un correcto proceso de aprendizaje en el niño deberíamos utilizar diferentes estrategias educativas y hacer la educación divertida.
·        Ejercitar ambos hemisferios y sus diversas inteligencias.
·        Brindarles un ambiente agradable, alegre, colorido, donde se sientan a gusto.
·        Fomentar el autocontrol con ejercicios de respiración, concentración y visualización.
·        Escucharlos y sentirlos.
·        El juego y la risa.
·        Actividades ecológicas.
·        Meditación...

Todas las personas que tienen contacto con niños deberían conocer  nuevas estrategias para poder llegar al niño y desde allí poder educar de manera preventiva e integral.
Tenemos que animarnos a crear nuevas pautas de aprendizaje, promover herramientas biointeligentes o lúdicas como música, baile, risa, arte, técnicas de relajación masajes, visualizaciones, deportes,….
Estas herramientas trabajan  directamente sobre el cerebro emocional, y libera situaciones emocionales traumáticas del pasado.
Permitirnos como educadores No dar las respuestas sino pistas y dejar que el niño descubra por sí mismo.
Aprender a utilizar terapias alternativas (musicoterapia, relajación, etc.) que ayuden a los niños a desarrollarse como seres de luz únicos e irrepetibles desde el amor. Cooperativos, inocentes, íntegros, libres y abiertos. Para cubrir las necesidades de estos nuevos niños que necesitan máxima atención, afecto estable, seguridad emocional, limites.

Para pensar
¿La  intervención  que hago como profesional, ayuda al niño para su desarrollo físico, psíquico y emocional?
¿Nuestra  intervención puede modificarle la vida del niño? ¿De qué manera?
¿En lo profesional /personal oigo al niño o solo miro el deseo del adulto?